Solo porque Teresa Giudice esté dispuesta a someterse a una cirugía plástica, eso no significa que vaya a permitir que sus hijos hagan lo mismo sin establecer algunas reglas básicas. Resulta que a esta mujer de 47 años, que tiene cuatro hijas con su esposo Joe Giudice, le parece bien que sus hijos terminen el trabajo con una excepción: deben tener al menos 21 años o más.
Durante la Ultimate Women’s Expo de Nueva Jersey, se le preguntó a Teresa cómo se siente acerca de las adolescentes que se someten a una cirugía plástica. La estrella de Real Housewives of New Jersey está únicamente en contra porque cree que es mejor esperar para tomar una decisión tan importante.“Me interesan mucho las cirugías plásticas, pero no los adolescentes”, dijo a Life & Style y a otros reporteros durante el evento del 3 de noviembre. Teresa luego admitió que no permitiría que su hija mayor, Gia Giudice, de 18 años, cambiara su apariencia si quisiera en este momento.
“No, no dejaría que Gia hiciera nada por un tiempo”, confesó. “Quiero decir, supongo que sabes, después de los 20, si quieres hacer algo como después de los 21… Tienes que asegurarte de que tu cuerpo esté completamente desarrollado. O sé que las chicas jóvenes se operan la nariz y pienso, ya sabes, si tienes una nariz grande, es mejor que te la arregles. ¡¿Por qué no?!"
La estrella de telerrealidad también reveló cómo ha sido su viaje por la cirugía plástica y agregó que esperó hasta después de convertirse en madre porque no se sentía bien consigo misma. “Creo, quiero decir, lo único que me he hecho son mis senos, y la única razón por la que hice eso, y lo hice después de tener tres bebés, fue porque no me gustaba cómo se veían.Solo lo hice por mí porque, um, sí, simplemente no me gustaba cómo te veías”, reveló.
Incluso cuando su esposo le aseguró que se veía bien, Teresa decidió seguir adelante para sentirse feliz. “Quiero decir, Joe dijo: ‘Estás bien, no tienes que hacer nada’. Pero lo hice por mí y luego, después de hacerlo, tenía más confianza en mi cuerpo”, continuó. “Creo que si no estás contento contigo mismo y quieres someterte a una cirugía plástica, creo que deberías hacerlo porque después de hacerlo, te hace sentir mejor”. Nos parece que Teresa no es una mamá normal, ¡es una mamá genial!