El uso de herramientas pequeñas por los antiguos humanos es una razón enorme por la que somos únicos

15092020 MIN DE DEFENSA ANUNCIA EL USO DE HIDROAVIÓNES PARA LOS INCENDIOS BTV

15092020 MIN DE DEFENSA ANUNCIA EL USO DE HIDROAVIÓNES PARA LOS INCENDIOS BTV
Anonim

Las herramientas han sido durante mucho tiempo un elemento central de la búsqueda continua de los humanos para comprender nuestra propia evolución. El hombre creó herramientas, por lo que el hombre ha sido juzgado como único y cognitivamente complejo. El problema con esta línea de pensamiento, sin embargo, es que es cada vez más obvio que la creación de herramientas y el uso de herramientas hacen no haga a los humanos tan únicos como nos gustaría pensar: muchos animales, desde orangutanes hasta cuervos, también hacen herramientas.

Qué actualmente nos hace especiales, argumentan los paleoantropólogos en una próxima visión general, es la práctica exclusivamente humana de crear pequeña herramientas. En la edición de marzo / abril de Antropología evolutiva, un equipo de investigadores sostiene que los investigadores anteriores subestimaron la medida en que los fabricantes de herramientas prehistóricas "fueron pequeños". Razonan que la creación de herramientas en miniatura fue en realidad un componente central de la tecnología temprana, y la práctica de hacer estos aparatos nos permitió prosperar.

"La fabricación y el uso de herramientas pequeñas fue una parte clave del conjunto de comportamientos adaptativos de nuestros antepasados", dice el coautor de la visión general y becario postdoctoral de Emory College Justin Pargeter, Ph.D. Inverso. "La capacidad de implementar tecnologías en amplios rangos geográficos y entornos ciertamente contribuyó a nuestra expansión global".

Cuando Pargeter dice pequeño, quiere decir pequeña - Herramientas que un adulto puede encerrar en la palma de su mano y sostener cómodamente entre las puntas de sus dedos pulgar e índice. Él cree que estas pequeñas herramientas se han pasado por alto en el deseo de la academia de hacer grandes descubrimientos.

Antes de esta visión general, la miniaturización se consideraba más como un fenómeno reciente: la creación de elementos como el microchip que se consideran modernos. Aquí, Pargeter y su equipo argumentan que el proceso de miniaturización es un fenómeno tecnológico a largo plazo, y hacer cosas como el microchip es una progresión natural de lo que nuestros ancestros comenzaron hace millones de años.

Pargeter y coautor John Shea, Ph.D., profesor de antropología en la Universidad de Stony Brook, observaron que las investigaciones anteriores han demostrado que se han encontrado escamas de piedra de menos de una pulgada de longitud dentro del registro arqueológico en todos los continentes. Estos copos, aunque pequeños, eran eficientes para perforar, cortar y raspar.

Pargeter y Shea consideraron la introducción de la escama de piedra hace 2 millones de años como el primer punto de inflexión para la miniaturización; Su uso no solo fue generalizado sino que también fue esencial para las tareas diarias. El segundo aumento en la tecnología de miniaturización, argumentan, ocurrió hace unos 100.000 años con la invención de los insertos de piedra ligeros necesarios para el armamento de alta velocidad. Otra explosión de herramientas en miniatura ocurrió hace unos 17,000 años durante la última Edad de Hielo. Pequeños copos de cuarzo, del tamaño de un centavo, se usaban tanto para cazar como para cortar, actuando como una especie de navaja suiza.

El tamaño y la eficiencia de todas estas herramientas contribuyeron a la supervivencia y el éxito humanos. A diferencia de los objetos pesados ​​y pesados, las miniaturas eran livianas y fáciles de crear. Pero para crear algo tan pequeño y tan fuerte como una herramienta en miniatura, necesitas algo que ningún otro animal tiene: manos humanas.

"Las tecnologías miniaturizadas requieren un nivel de destreza manual que es un rasgo singularmente desarrollado en los homininos", dice Pargeter. “Esta destreza se basa en la forma de nuestras manos y especialmente en la morfología de nuestros dedos. "Los animales no humanos son creativos con las herramientas que usan, pero la mayoría, si no todos, carecen de la destreza manual para hacer y usar herramientas tan pequeñas".

Una mirada a nuestro mundo moderno muestra que no hemos perdido nuestra inclinación por las miniaturas, o nuestra creencia en su utilidad. Pargeter señala que la búsqueda de microchips, nanofibras y nanopartículas es una continuación de nuestra inclinación natural hacia soluciones innovadoras para problemas urgentes. Las soluciones, hemos aprendido, pueden venir en todos los tamaños. También existe la posibilidad de que nuestra historia de volverse pequeña esté vinculada a un encantamiento general con miniaturas.

"Creo que los humanos tienen una fascinación innata con los mundos miniaturizados", razona Pargeter, "con ver el mundo real a través de una lupa".

Resumen:

La miniaturización lítica fue una de las estrategias de producción de herramientas de piedra más generalizadas de nuestros ancestros del Pleistoceno y marca una diferencia clave entre el uso de herramientas humanas y no humanas. La miniaturización lítica, que suele equipararse con la producción de "microlitos", es un fenómeno más complejo, variable y de consecuencia evolutiva que involucra herramientas con respaldo pequeño, bladelets, herramientas pequeñas retocadas, escamas y núcleos pequeños. En esta revisión, evaluamos los diversos elementos tecnológicos y funcionales de la miniaturización lítica. Examinamos los supuestos arqueológicos acerca de por qué los trabajadores de la piedra prehistóricos se involucraron en procesos de miniaturización lítica al hacer pequeñas herramientas de piedra, pequeñas herramientas alargadas y pequeñas herramientas retocadas y respaldadas. Señalamos diferencias funcionales que motivan diferentes aspectos de la miniaturización lítica y varios casos en los que la sistemática arqueológica posiblemente ha llevado a los arqueólogos a hallazgos falsos negativos sobre la miniaturización lítica. Finalmente, sugerimos vías productivas por las cuales los arqueólogos pueden acercarse a la comprensión de las complejas fuerzas evolutivas que impulsan la variabilidad en la miniaturización lítica.